Nuestras personalidades se forman, en gran medida, durante nuestros años de infancia. Además, el orden de nuestro nacimiento juega un papel importante en la configuración de nuestra forma de ser. Algunos reciben mucha atención, mientras que otros pueden tener que luchar por ser el centro de vez en cuando, pero el hecho es que es un factor importante que influye en nuestro comportamiento.
La teoría acerca de esta relación fue propuesta en 1920 por Alfred Adler, compañero y amigo de Sigmund Freud. Según Adler, el orden de nacimiento de un niño juega un papel importante.
Primogénito (Hermano mayor)
Según Adler, el primer hijo es conservador, tiende a tener autoridad y posee cualidades de líder. Muchas veces toma la iniciativa. Acostumbrado a cuidar a sus hermanos menores y protegerlos, es cariñoso, y es muy probable que se convierta en un buen padre o madre en el futuro.
Segundo hijo (Hermanos del medio)
Se deja influenciar por su hermano o hermana mayor y muchas veces busca superarlo. El ritmo del desarrollo es más alto. Incluso puede proponer metas demasiado elevadas, lo cual aumenta la cantidad de fracasos. Sin embargo, estos sólo lo hacen más fuerte.
Hijo menor (Hermano menor)
Por lo general, está rodeado de cariño y atención por todos lados. Suele llevarse bien cpn las personas. Puede tener una sensación de inferioridad o ser dependiente. Sin embargo, tiene una gran motivación por superar a sus mayores. Muchas veces se vuelve el mejor en el área que elija para desempeñarse, ya sean los deportes o las artes. Sin embargo, el hermano menor puede ser más irresponsable y despreocupado que los hermanos mayores.
Hijo Único
A menudo compite con su padre. Por lo general, se encuentra bajo el control de su madre y espera la misma protección y cuidados de los demás. El rasgo particular de este estilo de vida es la dependencia de la atención y egocentrismo. Muchas veces encuentra dificultades para desarrollar relaciones con las personas de su misma edad. Es perfeccionista y sabe cómo lograr sus objetivos a pesar de todo.
CÓMO INFLUYE EN EL COEFICIENTE INTELECTUAL (IQ) DE LAS PERSONAS
La teoría acerca de que el orden de nacimiento influye en la personalidad y el IQ, se volvió popular, generando posturas encontradas entre la comunidad científica. Hay quienes están completamente en desacuerdo, mientras que otros aseguran que esto juega un papel importante en la personalidad del niño.
Los científicos de la Universidad de Leipzig y la Universidad de Johannes Gutenberg de Maguncia (Alemania) llevaron a cabo una investigación al respecto. Para ello, estudiaron más de 20.000 adultos de Estados Unidos, Alemania y Gran Bretaña. Allí compararon a los hermanos en las familias, considerando el orden de su nacimiento.
Así se descubrió que los hijos mayores tienen resultados más altos en las pruebas de inteligencia, aunque las diferencias no son demasiado significativas. Los científicos no encontraron ninguna prueba de que el orden de nacimiento influya en la estabilidad emocional e imaginación.
Cómo afecta la personalidad
Otra investigación encontró más pruebas de que el orden de nacimiento influye en la formación de la personalidad. Para ello, un grupo de científicos analizó 370.000 alumnos de preparatoria de EE.UU.
Las principales conclusiones fueron que los primogénitos son más honestos y propensos a ser líderes, y también menos sociales y resistentes al estrés. Además, los hijos del medio son más responsables y enfocados; y los hijos menores, más abiertos y sociales. Los hijos únicos en muchas ocasiones resultaron ser nerviosos pero bastante amistosos y sociales.
En realidad, hay que admitir que los datos de la investigación tienen una serie de imprecisiones porque no toman en cuenta factores sociales tan importantes como la nacionalidad, la educación, el bienestar y las relaciones dentro de la familia. Sí, el orden de nacimiento influye en la personalidad debido a distintas condiciones en las que crecen los niños. Pero no hay que olvidar que el papel más importante lo juega la relación entre padres e hijos, así como también la educación que se le brinde a cada uno de los pequeños en la familia.
¿Y tú que opinas? ¿Estas de acuerdo?